Entre copas.

Lo malo de la crisis de los cines y los videoclubs es que lo poco que queda en ciudades pequeñas persiste a base de cine más o menos comercial. Eso sí, a veces llega a manos de uno pequeñas delicias del cine menos comercial como “Entre copas”.

Entre copas, Sideways, es una película americana de 2004. Dirigida y con guión coescrito por Alexander Payne, junto con Jim Taylor (Novela: Rex Pickett). Los protagonistas son Paul Giamatti, Thomas Haden Church, Virginia Madsen y Sandra Oh, que os sonará de alguna famosa serie de médicos. La película cosechó multitud de premios, entre ellos: en 2004, Oscar: Mejor guión adaptado y 5 Nominaciones. 2 Globos de Oro: Mejor película comedia o musical, guión y 7 nominaciones. Se llevó el Premio BAFTA al mejor guión adaptado, por parte del National Board of Review: Mejor guión adaptado, actor de reparto (Haden Church), el Círculo de críticos de Nueva York: Mejor película, actor, guión, actriz y la Asociación de Críticos de Los Angeles: Mejor película y director. 5 premios. Como veis un palmarés encomiable.

Miles es un divorciado deprimido, aspirante a escritor, pero fracasado, y apasionado del vino, que se lleva a su amigo Jack, un actor también fracasado, a  hacer un viaje para visitar viñedos y probar vinos antes de su boda como despedida de soltero. Jack es un seductor y Miles, un pesimista. En mitad del viaje Jack confiesa a Miles que pretende saborear sus últimos días de libertad, Miles sólo aspira a paladear un vino perfecto. Jack se conforma con un Merlot barato, Miles se muere por el perfecto Pinot. Ambos se tambalean peligrosa y cómicamente en la crisis de la mediana edad.

La mezcla de los dos personajes resulta tan deliciosa como los vinos y la promoción de los viñedos de California que se hace a lo largo de toda la película. Los dos protagonistas realizan auténticos papelones y sobre ellos transcurre el devenir de la historia. Todo parece paladeable, desde los vinos hasta las conversaciones y se acaban gozando las dos horas de película, sus dos horas de guiones elaborados e inteligentes. La fotografía es tan años ochenta que el vestuario, el motel y la extraña pareja de Miles, Jack, Jack y Miles acaban generando una película 100% recomendable. Con varias escenas memorables, os dejo que la veáis y me contéis sobre ellas. Valoración: 8.

Buenas Noches y Buena Suerte.