Matrimonio a la italiana es una de esas obras del cine europeo que no deberían faltar en el haber de cualquier cinéfilo que se precie. La película, que data de 1963, fue dirigida por Vittorio de Sica y protagonizada de modo magistral por Sophia Loren y Marcelo Mastroianni. Está encuadrada en la corriente del neorrealismo italiano, y es una tragicomedia en toda regla.
En la ciudad italiana de Nápoles, durante la Segunda Guerra Mundial, Filomena Marturano (Sophia Loren) es una bella joven que está sola en el mundo y trabaja en un prostíbulo, pues no encuentra otra manera de ganarse la vida. Allí es donde conoce a Doménico Soriano, más conocido como Don Mimi, un acomodado burgués que la retira de la profesión y la lleva a vivir a su casa. Don Mimi le hará pasar las mil y un perrerías a Filomena, y en torno a la tortuosa relación gira toda la trama de la película.
La película nos deja escenas memorables, como la de Don Mimi intentando averiguar cuál de los tres muchachos presentados por Filomena es su hijo, o aquella en la que Filomena está aparentemente muy enferma. Sea como cuere, y así ha sucedido en infinidad de ocasiones en el mundo del cine, un dueto de actores de gran talento sostiene una película y la lleva a estar entre las grandes. Como hemos dicho al comienzo de la entrada, es una película básica en la historia del cine italiano. Recomendable para ver al menos una ve en la vida. Valoración: 7.
Buenas Noches y Buena Suerte.
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