Antes de comenzar esta crítica me gustaría matizar que no se trata más que de eso, una crítica de la película, no es mi intención juzgar ni escribir sobre el personaje de Ernesto Guevara.
Che: el argentino me atrajo desde su estreno, me picaba la curiosidad ante cuatro horas de cine sobre el Che. Al final decidieron partirla en dos, por el bien del espectador. Lo que es increíble es el papel de Benicio del Toro, espectacular, tan misterioso y enigmático como pasional desde la calma. Su interpretación merece un 10, sólo por su actuación la gente debería ver la cinta.
La película narra el comienzo del guerrillero, cómo se forjó su aventura revolucionaria y cómo recorrió media isla de Cuba a pie, herido, con asma.. Me llama la atención la humanidad del personaje durante toda la historia, sus cabreos, sus reflexiones, vemos al Ernesto Guevara médico, al revolucionario, al justo, al despiadado... Es increíble la autoridad que imparte a sus compañeros, sus incuestionables dotes de mando y su obsesión por la cultura, por enseñar a leer y a escribir para lograr un cargo en su guerrilla (en esto estaríamos completamente de acuerdo). El romanticismo del guerrillero revolucionario queda de manifiesto, aunque el precio a pagar sea mostrar su faceta más sanguinaria, por otro lado real: Patria o muerte. Nos ayuda a entender mejor el personaje la entrevista que le hace una periodista norteamericana a raíz de su visita a la ONU.
La película es por momentos demasiado documental, aunque genial documental, a veces lenta, pero es una buena película, diría que imprescindible lección de historia. Los retratos de Fidel y Raúl Castro son geniales, pero no me canso de repetir: el papel de del Toro es memorable. Me gusta que no se cae en heroicismos baratos ni en leyendas, el personaje es el que es. Ahora me quedo con el gusanillo de la segunda película, que no es tal segunda, es toda una, pero era demasiado heavy jalarse 4 horas de Che. Valoración: 7.5.
Buenas Noches y Buena Suerte.
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