El hombre que vino a cenar.

Sheridan Whiteside es un personaje inolvidable para cualquiera que haya visto El hombre que vino a cenar. Se trata de un afamado crítico, locutor de radio y escritor mediático e influyente que viaja a un pueblecito, tiene que cenar con una familia que le espera con ansias desde hace semanas contra su voluntad, con tan mala fortuna que cae entrando en su casa y se rompe la cadera. Este irrespetuoso personaje se hace con el control total de la casa, comenzando una historia de manipulaciones, triquiñuelas y enredos muy divertida.

Monty Woolley interpreta uno de los papeles de su vida, se le nota cómodo, es genial su manera de gesticular y de dar vida a un genio, loco y lúcido. Interesante también el duelo entre la mítica Bette Davis y Ann Sheridan, así como el papelón a lo Harpo Marx de Richard Travis. Es una película divertida para pasar un buen rato, con humor socarrón, un clásico del cine de humor diría yo, pero a su vez, imprescindible. Valoración: 7.5.

Buenas Noches y Buena Suerte.

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