2001: Una odisea en el espacio.

Estamos ante el film santo y seña de la ciencia ficción, una cinta que pese a tener 41 años cuenta con unos efectos especiales que nada tienen que envidiar a las grandes superproducciones de tiempos posteriores. Tan mitificada está esta cinta que uno no sabe si es como una enajenación grupal o es que yo ya me sorprendo de poco.

Las interpretaciones de esta cinta son muchas, y muy diversas, Kubrick dijo Sois libres de especular acerca del significado filosófico y alegórico de 2001. La historia se presenta en diferentes actos, a modo de ópera con entreactos en los que la pantalla se queda negra tres minutos con una música de fondo. La primera transcurre en una manada de primates que descubren las armas, se enfrentan a otros grupos y de repente reciben una piedra. Luego se presenta una historia futurista con naves espaciales y un hallazgo espectacular en la luna, luego tras otro entreacto aparece otra misión espacial comandada por una nave pilotada por un ordenador que se vuelve majara. La última parte es una vuelta de tuerca más en la rayada general en una habitación estilo Luis XVI con una clara metáfora sobre la vida.

La película es una buena película, también es verdad que no es lo mismo verla ahora, con los avances que hay, que hace 40 años. Para mí lo más espectacular es la imagen, la dirección, la banda sonora y los efectos especiales. La historia, o las historias, son Kubrick 100%, futurismo e innovación. Con muchísimas interpretaciones puede que sea una de las películas sobre las que más se ha debatido y estudiado.

Personalmente considero que si bien estamos ante una obra maestra de la ciencia ficción no es para la sobrevaloración que siempre se le ha dado. Entiendo que marcara a una generación, pero quizás no estamos ante el culmen del cine que nos quieren vender algunos. Eso sí, tiene un magnetismo que atrapa. Valoración: 7.8.

Buenas Noches y Buena Suerte.

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