Si el jueves fue un día para la historia el viernes estuvo a punto de pasar a la historia por ser el día en el que mi coche arde. Un incendio, mucho viento y una cancelación clave, la de Kings of Leon. Sin duda lo más triste del festival, quedarnos sin ver a ese pedazo de grupo. Eolo quiso actuar en el escenario verde impidiendo que los Kings no pudieran hacerlo, eso sí, lamentable la organización permitiendo que salieran Tom Tom Club cuando sus dos predecesores no salieron. ¿Qué pasa? ¿sus vidas valían menos?
De lo que vimos: Cooper, bien, españoles, buena música pop y letras optimistas, en un concierto plagado de poppies y españoles saltando. Ver a Cooper me impidió ver a Nacho Vegas, que según me han contado estuvo muy bien. Pero que conste que el ex flechazos Alex Díez dejó una frase para la posteridad: “Hola, somos Cooper y hacemos canciones de amor y de verano”.
De lo del coche mejor no hablar, incertidumbre, Luis mandándome noticias (el pobre pringao no llegó a ver a nadie puesto que venía de trabajar). Aparqué justo en el camino contiguo al descampado en el que se produjo el incendio. Menos mal que el viento iba en la otra dirección, al final un susto, mucho humo, mucho viento, y el policía ricitos que nos hizo dar un rodeo para nada. Aún le deben pitar los oídos.
Ante el descontento general nos emplazaron a la mañana del viernes para ver si actuaban los grupos suspendidos, Kings of Leon no lo hicieron, nos constará esperar a otra ocasión. Os dejo con I want you, uno de mis temas favoritos.
Buenas Noches y Buena Suerte.
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